UBICACIÓN GEOGRAFICA.
Se
desarrolló en el actual departamento de Ancash, tuvo su eje de influencia en el
callejón de Huaylas. Se le conoce con las denominaciones de: Huaylas, Callejón,
Santa y Copa.
Recuay es un
estilo y una cultura con dos polos de desarrollo. Una, al Norte, que
correspondía a la cuenca del Chuquicara, en la provincia de Corongo. El otro,
al Sur, siguiendo el Callejón de Huaylas, hasta Catac.
La Cultura
Recuay se desarrolló entre los años 200 a 600 d. C. aproximadamente.
Pertenece al
periodo intermedio temprano.
Larco Hoyle Descubre que la cultura llamada
Recuay o Callejón de Huaylas tuvo su sede en el valle de Santa y no en la
Sierra, como se creía.
ORGANIZACIÓN ECONÓMICA.
Las tareas
que la caracterizaron fueron la agricultura, la ganadería y las artesanías;
especialmente la cerámica, escultura, metalurgia, y arquitectura. Domesticaron
a la llama y la alpaca por lo que en su alfarería aparecen con una cuerda al
cuello. No fue como dice Lumbreras una cultura cerrada sino que quizás, a
través del comercio, se difundió y conectó a otros centros de la Sierra y de la
Costa.
ORGANIZACIÓN SOCIAL Y
POLÍTICA.
La sociedad recuaína mantuvo a cierto sector social constituido por los
sacerdotes y guerreros; quienes gozaron de muchos privilegios frente a los
campesinos, ganaderos y artesanos. Los guerreros tenían escudos cuadrados y
penachos muy vistosos; los señores importantes vestían con túnicas elegantes,
collares de turquesa, conchas, cuarzos y lapislázuli, gorros de lana que les
cubrían – en ciertos casos – las cabelleras, adornos de cobre y plata, etc.
Pusieron mucho interés en el aspecto guerrero, destacando los
personajes o líderes cazadores de cabeza-trofeo, quienes estaban muy bien
armados y preparados militarmente. Esto hace deducir que hubo una
administración estatal férrea, bajo la hegemonía del grupo sacerdotal-guerrero
que controlaba y desempeñaba los poderes religioso, militar y político en la
sociedad Recuay. Los señores, casi siempre, estuvieron acompañados por los
guerreros y músicos con antaras y tambores.
MANIFESTACIONES CULTURALES.
CERÁMICA.- Se caracteriza por el gollete – puente a manera
de estribo, decorado con dibujos en negro negativo sobre blanco y rojo, es
escultórica y escenográfica. Se puede decir, en suma, que presenta tres tipos
de decoración: negativa, pintada en positivo y modelada. Las formas que más
destacan y son más abundantes son: tazas, tostadoras, cucharas, cucharones,
vasos con base anular, ollas con pedestal trípode, ollas oblongas con cuellos
angosto y gollete en forma de plato, botellas con cabezas modeladas unidas por
una asa puente, vasijas dobles, cántaros con gollete chico, etc.
Sin embargo, en Recuay, más que en cualquier otro estilo, es necesario
distinguir dos categorías de vasijas: las ceremoniales y las domesticas. Las
primeras, mayormente ofrendas funerarias, han servido para definir el estilo, y
en consecuencia, la periodificación cultural del área. Las características de
la cerámica doméstica, por ahora, resultan casi totalmente desconocida.
Entre las formas
frecuentes se encuentran:
ü Cuenco
hemisférico con base convexa.
ü Vaso
de cuerpo ovoide y base pedestal.
ü Taza
de cuerpo hemisférico y base anular.
ü Taza
trípode de cuerpo hemisférico y pies cilíndricos.
ü Cazuela
de cuerpo hemisférico y mango corniforme.
ü Olla
de cuerpo esférico, asa horizontal y mango corniforme.
ü Olla
trípode de cuerpo globular y pies cónicos altos.
ü Olla
de cuerpo globular y base convexa.
ü Cántaro
con cuerpo ovoide y base convexa, sin asas.
ü Cántaro
con cuello constreñido, boca ancha y base discoidal plana.
ü Cántaro
semiovoide y base discoidal plana o convexa.
ü Botella
con gollete cilíndrico y asa puente.
ü Botella
con gollete estribo y cuerpo troncocónico.
ü Botella
con cabeza modelada unida a un pico por asa puente.
ü “Canchero”
con cuerpo lenticular y mango corniforme.
ü “Puruña”,
cucharon con sólido mango corto.
ü Trompeta.
ESCULTURA.- Se cuenta en la misma
cerámica; siendo las representaciones mas modeladas el cóndor, la garza, la
lechuza, el jahuar, el armadillo y la serpiente. También existe una escultura
en piedra como estelas, cabezas clavas, personajes sentados, felinos, etc. son
típicas los restos escultóricos encontrados en Aijay – Huaraz.
Desde el punto de
vista arqueológico se reconocen cinco tipos:
Estatuas
o monolitos.
Lajas
verticales o estelas.
Lajas
horizontales o dinteles.
Cabezas
clavas.
Lápidas
cuadradas.
TEJIDOS Y METALURGIA.- Aunque no se
han conservado mayormente, las evidencias indirectas indican que poseyeron
tejidos y diversos tipos de ornamentos. En las excavaciones se han recogido
agujas, alfileres, pendientes de cobre y algunos objetos menores de concha.
Los orfebres de Recuay
dominaron la mayoría de las técnicas orfebres del Perú antiguo, como: laminado,
embutido, troquelado, biselado, vaciado, enchapado, grabado, soldado y
trefilado.
Se usaron con
frecuencia incrustaciones de otros materiales como sodalita y crisocola, tal
como lo evidencia los objetos de metal encontrados en una suntuosa tumba de
Pashash.
ARQUITECTURA.- Hubo tres tipos de
vivienda según Lumbreras que se pueden resumir así: una compuesta por cuartos
paralelos en forma de galerías, con techos de lajas y relleno de tierra existiendo dos cuartos que
se comunican por intermedio de un vano interno; otra con las mismas
características del anterior, pero donde existen cuatro cuartos y finalmente un
tipo de vivienda subterránea constituida por un cuarto con ciertas
subdivisiones. Estas clases de casas se han encontrado en Cantac, Copa,
Arancay, Tambo, Janku, Shumay y otros sitios. Viviendas ceremoniales como
Paschas en la provincia de Pallasca en Ancash.
En la arquitectura
funeraria de Recuay destacan imponentes mausoleos, edificados con lajas,
recubiertas con otras de mayor tamaño, pudiendo señalarse entre los más
notables los de Molleucro, Catayoc y Pashash, en especial el mausoleos de
Pashash, excavada se halló más de 277 ofrendas y que constituye uno de los más
elaborados entierros peruanos excavadas cientifícamente.