miércoles, 22 de mayo de 2013

ORGANIZACIÓN SOCIAL DE LOS INCAS


SOCIEDAD CLASISTA.
La sociedad incaica fue clasista; es decir, estuvo dividida en clases sociales. Los habitantes del imperio no eran iguales, existió profundas diferencias sociales determinadas por su origen.

CLASES SOCIALES.
Existieron dos clases sociales básicas: la nobleza y el pueblo.

1.- LA NOBLEZA.- Era la clase social dominadora del Tahuantinsuyo. Tenía todos los privilegios. La nobleza fue dividida en:
  1. Nobleza Imperial.- Constituida por el Inca, la coya, hijos legítimos, hermanos y descendientes por una sola línea imperial y solar. Constituían la panaca, que era la familia de cada inca, formaba un ayllu real. El único hijo del inca que no formaba parte de la panaca, era su heredero, que era el próximo monarca, porque cuando llegara a serlo formaría su propia panaca. La nobleza imperial constituía toda una verdadera aristocracia y tenía en sus manos todas las funciones estatales y todos los privilegios.

  1. Nobleza Cusqueña.- Constituida por toda la parentela familiar imperial reinante, cuyo distintivo consistía en deformarse las orejas por medio de pendientes (aretes), a quienes los españoles los llamaron “orejones”.

  1. Nobleza por Asociación.- Comprendía a los habitantes dentro de un sector geográfico bien definido; el valle del cusco, el valle de Urubamba y el valle de Apurimac. Esta gente por el hecho de vivir en estos valles eran considerados nobles.

  1. Nobleza Local.- Integrado por los curacas y sus familiares, es decir, los jefes locales y tribales de los pueblos conquistados. Una vez que éstos reconocían a los incas y se integraban al Imperio, eran considerados nobles, aunque de menor jerarquía.

  1. Nobleza de Privilegio.- Integrada por aquellos que por notables servicios en la guerra o en la paz, el inca premiaba incorporándolos a la nobleza.

Existieron algunos sectores o grupos que gozaron de una situación de excepción en la sociedad incaica, como el sacerdocio y las accllas.
    • El Sacerdocio: En el Tahuantinsuyo, el sacerdote era un hombre que tenía que estar dotado de cierta investidura y espíritu, que sólo poseían determinados seres  y tenía que pertenecer a la nobleza cusqueña. Al inicio del imperio, el jefe de la Iglesia fue el mismo inca, quien reunía en sí el poder político, militar y religioso; así pasó a ser jefe de la Iglesia un hermano o tío de él, que era el sumo sacerdote o willac huma “cabeza que habla”, que era muchas veces tan poderoso o aún más poderoso que el Inca, por que cuando éste moría, las insignias pasaban al supremo sacerdote, quien las imponía al nuevo Inca.
    • Las Acllas: Aclla quiere decir “escogida” o seleccionada. Eran las mujeres escogidas, cuando niñas, por su belleza; las reclutaban por todo el imperio y se les recogía en las acllahuasis. Existieron dos clases de acllas: Las que estaban dedicados exclusivamente al culto (auxiliares del sacerdocio) y las que eran escogidas para ser mujeres del Inca y los nobles. La preparación que recibían fue distinta. Mientras que a las primeras las preparaban en las prácticas del culto, las segundas debían ser iniciadas para desempeñar como buenas madres de familia: cocinar, tejer, crianza de animales, cerámica, etc., una aclla salía de la clase popular al ingresar en el acllahuasi ascendía de categoría social.

2.- EL PUEBLO.- En la base de todo el sistema social del incario se encontraba el pueblo, constituido básicamente por el hatunruna y el yanacona.
  1. El Hatunruna: De las voces quechuas (hatún : grande; runa: hombre). Los hatunrunas eran los hombres de los sectores populares, tanto quechuas, aymaras, etc., en su mayoría eran campesinos. Vivían en las zonas rurales, en pequeños poblados y eran cuidadosamente controlados por la administración estatal incaica. Cada hatunruna debía vestir de modo diferente, según su provincia, entre los hatunrunas existía la igualdad más absoluta; solo tenía derechos derivados de la organización comunal como: usufructo de topo, de los pastos comunales, de su casa, de sus cosechas, de su huerto, de su lana y de objetos de uso personal.
  2. El Yanacona: No existe estudios definitivos sobre el yanacona, ni sobre su origen, ni su condición en la sociedad incaica; sin embargo, se puede afirmar que eran hombres asignados a servicios especiales. Era considerado súbdito directo del inca, ya no pertenecía a su ayllu y estaba exento de toda obligación correspondiente a su marka. Gran numero de ellos eran llevados al Cusco para utilizarlos en el servicio personal del inca, de nobles, en la limpieza de los palacios, en las ocupaciones inferiores de la administración; otros se quedaban en diferentes partes del Imperio al servicio de los principales. El cronista Cabello y Balboa cuenta sobre el origen de estos servidores. El término derivaría del lugar Yanamarca y que a causa de una conspiración de estos pueblos contra Túpac Yupanqui, 6 000 indígenas convictos de Yanamarca fueron condenados a ser servidores de los vencedores: los incas. La condición de yanacona era hereditaria; por esta razón, algunos autores han supuesto que allí se encontraba una forma de trabajo forzado, parecido al de los siervos del feudalismo. Consideramos que tanto los chasquis, las acllas, los mitimaes y los yanaconas, estuvieron sometidos a un sistema de excepción de la sociedad clasista de los incas.
NORMAS DE CONDUCTA
En el Tahuantinsuyo todo era regido por normas y leyes; no estaban compilados en forma escrita en un código, eran más bien un derecho impuesto por la costumbre; por lo que eran claras, precisas y poco numerosas. Cada uno sabía lo que debía y lo que no debía hacer.
Algunas de las normas de conducta en el Imperio de los Incas, constituyeron máximas cardinales de la moral incaica y se convirtieron en una forma de salud común.
  • AMA SUA              No seas ladrón.
  • AMA LLULLA      No seas mentiroso
  • AMA KELLA         No seas perezoso
La conducta moral reposaba en estos tres principios, es decir, la honradez, la veracidad y el trabajo; constituían la base y el patrón de toda la legislación en el orden jurídico y moral de los incas.

La no observancia de estos principios no solamente constituía una falta, sino un delito.
Los Incas, como era su política con los pueblos conquistados, toleraron que siguieran vigentes algunas normas de conducta y costumbres jurídicos de dichos pueblos, al mismo tiempo impusieron el derecho imperial cusqueño.

EL AYLLU
El ayllu era la célula fundamental de la organización social, política y económica de los incas. El ayllu era la agrupación de familias o una comunidad semejante al clan, gens, etc., unidas por vínculos de sangre; poseedoras de territorios, donde vivían, trabajaban y usufructuaban colectivamente; gobernados políticamente por un solo jefe, el curaca; y se creían descendientes de un antepasado común llamado huaca o tótem (puma, cóndor, río, cerro, trueno, rayo, etc.) y de quien llevaban el nombre.
Si el tótem era una serpiente, pertenecían al ayllu amaru; si el tótem era un halcón, el ayllu era huamán, etc.

VINCULOS DEL AYLLU
Los miembros del ayllu se consideraban unidos por los siguientes vínculos:
  1. DE SANGRE.- Era un vínculo de parentesco. Los miembros del ayllu creían tener un origen común; es decir, se creían descendientes de un mismo antepasado, de un mismo tronco familiar que se había convertido en su dios protector.
  2. ECONÓMICO.- Constituido por el territorio o lugar donde vivían, trabajaban y usufructuaban en común, llamado marka.
  3. RELIGIOSO.- Era el culto que todos los miembros del ayllu rendían a la divinidad protectora de la que se creía descender, llamado tótem “ ser que engendra” , que podía ser un cerro, un relámpago, un halcón, etc.
  4. POLÍTICO.- Este vínculo también los unificaba porque todos los miembros del ayllu tenían un mismo jefe: el curaca, tiempo de paz y el sinchi en tiempo de guerra.

jueves, 9 de mayo de 2013

ORGANIZACIÓN ECONÓMICA INCAICA

I.- LA AGRICULTURA INCAICA.
Durante los Incas, la antigua agricultura andina llegó a su más alto desarrollo. “Alcanzó su clímax”, dicen los etnohistoriadores. Esa actividad generó excedentes como jamás se había logrado antes en el mundo andino. La agricultura incaica llegó a ese grado de evolución como demostración fehaciente del largo periodo de aprendizaje, experimentación y desarrollo de sociedades y civilizaciones anteriores.

El imperio de los incas fue una “agrupación de comunas agrícolas y sedentarios”, estuvo integrado por un “pueblo laborioso, disciplinado y sencillo”, que vivía en un ambiente de bienestar material donde “las subsistencias abundaban”, al tiempo que la población crecía, “siendo la agricultura su principal actividad”, nos dice José Carlos Mariategui. La base de la economía, por tanto, fue la actividad agrícola. La agricultura se convirtió en una actividad intensiva por que aumentaron las áreas de cultivo, y su cuidado, control y administración se hicieron eficientes en todos los rincones de sus cuatro suyos. Para eso, se dedicaron a construir innumerables sistemas de andenerías en las faldas de los cerros. Se estima que la ampliación de las tierras cultivables, con los andenes, aumentó en 2 millones de hectáreas. En total, según cálculos hechos por Santiago Antúnez de Manolo, los incas lograron tener 7 millones de hectáreas de tierras aptas para cultivos permanentes. Por tanto, los andenes representaron el 28.57% de ese total.
Agricultura, arte, ciencia e industria que se ocupa de la explotación de plantas y animales para el uso humano. En sentido amplio, la agricultura incluye el cultivo del suelo, el desarrollo y recogida de las cosechas.

TECNICAS DE CONSERVACIÓN DE ALIMENTOS.- Hacían conservaciones de alimentos mediante técnicas especiales. Se obtenía el chuño, quitándole el contenido de agua a la papa, para ello, sometían a este tubérculo al frio y al calor, alternativamente, hasta convertirlo en almidón. El charqui, conocido también desde tiempos anteriores, fue generalizado en todo el imperio. Es la carne seca de llama. De la costa, los pescadores abastecían a otros poblados con pescado seco y salado.
DISTRIBUCIÓN DE LAS TIERRAS.- A cada familia de los comunes o runas se le daba una determinada cantidad de tierras para su manutención. Dicha familia vivía, básicamente de lo que le rendía esa área cultivable. Para asegurarse de que ello se cumpla, los funcionarios del gobierno inca, cada año (junio – agosto) visitaban las aldeas y las llactas y evaluaban las necesidades de los hatún runas, para darles lo necesario en tupus; una medida variable según la región.

A cada varón le correspondía un tupu y a cada mujer medio tupu. Uno y otro variaban; primero, según la actividad agropecuaria y, segundo, de acuerdo con el tipo de suelo y cultivo. Por ejemplo, no era lo mismo el tupu para el criador de vicuñas que para el criador de la llama. Por otro lado, para la familia dedicada al pastoreo, el tupu era mayor que el de la familia dedicada a la agricultura.
Daban “tierras para el sol” y “tierras para el inca”. Por supuesto, aquellas tierras eran para la nobleza cusqueña. Además esas tierras entregadas al estado inca eran las más productivas del imperio.

SISTEMA DE TRABAJO COLECTIVO.- En las tierras del Estado (Inca y Sol), del curaca y de los comunes, se practicaba el trabajo masificado y colectivo.
La Mita era el laboreo que la comuna realizaba en las tierras del Estado y del Curaca. Era el pago o el tributo en trabajo, además era el trabajo en la construcción de palacios, templos del sol, casas escogidas, fortalezas, caminos, puentes, tambos, etc., cada curaca, por turnos, llevaba a sus mitayos para que realicen su mita correspondiente.

El Ayni y La Minca eran verdaderos sistemas de reciprocidad agrícola. Eran el trabajo colectivo en las parcelas de un Inca, de un Curaca o a favor de la comunidad o Ayllu. El Ayni era la ayuda que se prestaba en la construcción de una vivienda familiar. Una Minca era la participación de todos los miembros del Ayllu en la construcción de un puente, la atención y bebida corría a cargo del Curaca y siempre un conjunto de músicos amenizaba la tarea comunal.
 
LOS TAMBOS.- Los tambos, construidos a lo largo de los caminos, fueron denominados “posadas” por los españoles del siglo XVI. Pease señala que es posible que efectivamente los tambos hayan funcionado como alojamiento de los viajeros, pero la estructura de sus depósitos hace pensar en varios usos distintos. Los cronistas mencionan con mayor frecuencia su utilización como alojamiento para los ejércitos del inca, y para los numerosos cargadores que conformaban su cortejo ritual. Los tambos eran hosterías para los funcionarios encargados de inspeccionar los cultivos y obras estatales. Otras fuentes señalan la existencia de tambos destinados de forma especial para servir de alojamiento al gobernante cuzqueño cuando se encontraba recorriendo el territorio del Tahuantinsuyo.

Los tambos cumplieron funciones de alojamiento y almacenamiento en el Tahuantinsuyo. Fueron construidos a lo largo del camino incaico y la calidad de sus depósitos asombró a los primeros europeos que llegaron a los Andes.

LOS DEPÓSITOS.- Las collcas (depósitos) se encontraban distribuidas a lo largo de todo el territorio del Tahuantinsuyo. Consistían en hileras de edificios de piedra techados con paja, algunos de ellos ubicados en los cerros. Estos depósitos fueron construidos con la finalidad de almacenar en ellos una considerable variedad de productos. En unos se guardaba alimentos, en otros armas, adornos y herramientas, pero los más numerosos eran los que contenían lana, algodón y ropa. La tradición oral le atribuye a Pachacuti la organización de los depósitos. Su función en un primer momento habría sido almacenar comida para los soldados que extendieron los dominios del Tahuantinsuyo y para los pobladores que se encargaron de la reconstrucción del Cuzco.
Las collcas eran depósitos de almacenamiento en los que se conservaba diversos tipos de productos y bienes: armas, vestidos, alimentos, entre otros.

LOS QUIPUS.- Los quipus eran cuerdas anudadas de uno o varios colores que servían para guardar información. Se les identifica mayormente como un sistema de contabilidad, aunque servían también como un recurso mnemotécnico que permitía recordar hechos acontecidos. Los quipus fueron conocidos por los cronistas, quienes hablaron detenidamente de ellos y emplearon la información que contenían, interpretada y proporcionada por los quipucamayoc, especializados en su manejo. El quipu consta de una cuerda principal –sin nudos– de la cual se desprenden otras generalmente  anudadas y de diversos colores, formas y tamaños. Puede haber cuerdas sin nudos, como también cuerdas que no se desprenden de la principal sino de la secundaria. Los especialistas contemporáneos piensan que los colores y quizás la forma de trenzado de las cuerdas indican los objetos, mientras que los nudos harían referencia a las cantidades, incluyendo el número cero. Entre los quipus conocidos hay una gran variedad de tamaño y complejidad, pues van desde los muy simples hasta los que tienen más de mil cuerdas (F. Pease). Los quipus fueron utilizados por el estado inca para una mejor organización de la producción, llevando el registro de los pobladores de cada uno de los grupos étnicos que entregaban su fuerza de trabajo a través de la mita. También se usaron para registrar lo almacenado en las collcas, para lo cual todo depósito tenía su quipucamayoc residente.
El quipu brindaba información estadística y servía para recordar determinados hechos históricos. Los especialistas consideran que los colores y la forma del trenzado proporcionan información sobre los objetos, en tanto que los nudos aluden a las cantidades.

II.- LA GANADERÍA.
Desde tiempos anteriores a la conquista inca la ganadería fue una de las actividades económicas más importantes. Las especies que la conforman son la llama (Lama glama), la alpaca (Lama pacos), la vicuña (Lama vicugna) y el guanaco (Lama guanicoe). El camélido más difundido en términos geográficos es el guanaco, pues se le encuentra desde los ámbitos sudecuatoriales hasta la Tierra del Fuego.
Los camélidos andinos prestaban diversos servicios al hombre. La llama y la alpaca, variedades domesticadas, eran especialmente importantes en la economía andina. La llama era utilizada preferentemente como animal de carga. Las caravanas estaban conformadas principalmente por machos. Para los viajes más largos, como entre el Collao y la costa, se prefería a machos “nuevos” de más o menos dos años de edad. La recua viajaba desde el alba hasta el mediodía, deteniéndose en lugares con  agua y pastos. El mantenimiento de los animales no era difícil, dado que no se les proporcionaba otro forraje que los pastos encontrados en la ruta. Los animales se alimentaban durante la tarde y rumiaban por la noche, atados a una cuerda común.

Ganadería, cría de animales que tiene como objeto obtener un aprovechamiento de los mismos. Es importante diferenciarla de la cría de animales de compañía o de la de especies amenazadas, por ejemplo, que no se corresponden con el concepto tradicional de ganadería. Se habla de ganadería, normalmente, cuando los animales se desarrollan en un estado de domesticación, siendo su aprovechamiento, principalmente, el de la carne, la leche, el cuero, los huevos, entre otros productos. La acuicultura puede identificarse como un tipo de ganadería acuática.

III.- LA PESQUERÍA EN EL INCANATO.
Desde los primeros años de su evolución cultural, el hombre fijó su atención en el mar. Primero en el aprovechamiento de sus riquezas alimentarias (“despensa de primer orden”) y, segundo, en su utilización como vía de comunicación. Las especies marinas más utilizadas fueron: moluscos, macha, choro, chanque, concha de abanico, cangrejos, corvina, anchoveta, etc.
El pescado fresco era el plato preferido en las principales festividades. Para alimentarse los asaban o los cocían. Pero también los salaban y secaban para conservarlos, práctica que era común entre los pescadores de la costa norte y central, y cuyo objetivo, en un buen porcentaje, era intercambiarlos por productos andinos.
Pesca, término aplicado a las actividades relacionadas con la captura de peces o mariscos con una finalidad económica. La pesca es fundamentalmente marina, pero también se lleva a cabo en los grandes lagos y ríos. Las pesquerías o caladeros más productivos se extienden desde la costa hasta el borde de la plataforma continental, que se sitúa a una distancia de tierra de unos 80 km de promedio. Estas aguas tienen menos de 200 m de profundidad pero, debido a las corrientes y temperaturas favorables y a la abundante vida vegetal, albergan la mayor parte de los peces de los océanos. Las pesquerías son especialmente productivas en zonas de corrientes emergentes, donde suben a la superficie aguas profundas frías y ricas en nutrientes. La captura de ballenas, moluscos y crustáceos y la recolección de algas como la laminaria gigante también se consideran parte de la industria pesquera.
 

BACTERIAS EN EL CUERPO HUMANO

Aunque no podemos notarlo, el cuerpo humano de cada uno es en sí todo un mundo, habitado por seres microscópicos. Se calcula que en el cuerpo de un solo ser humano habitan unas 100 billones de bacterias y otros microorganismos. La creencia más común es que se trata de elementos invasores y dañinos para el hombre; pero, muy por el contrario, su presencia no es algo extraño, ya que las bacterias, virus, hongos y otros seres microscópicos están en relación de diez a uno comparados con las células del cuerpo de un adulto sano. Asimismo, muchos de estos seres son de gran utilidad para los procesos diarios del organismo en el que se alojan, tales como asimilar los alimentos, sintetizar vitaminas o mantener activo el sistema inmunológico, entre otras cosas. Del mismo modo, la industria ha aprovechado las capacidades de las bacterias para diversos productos en beneficio de la humanidad. De ahí, la importancia de conocerlas y comprender los beneficios y perjuicios que nos pueden ocasionar en función del tipo de bacteria con el que se esté en contacto.

BACTERIAS BENEFICIOSAS PARA EL HOMBRE.

1)   El género Bacillus es productor de antibióticos (gramicidina, bacitracina, polimixina), proteasas e insecticidas.

2)   El Clostridium acetobutylicum puede fermentar los azúcares, originando acetona y butanol.

3)   El Streptococcus y el Lactobacillus producen yogur.

4)   El Corynebacterium glutamicum es importante en la producción de antibióticos, como anfotericina B, kanamicina, neomicina, estreptomicina, tetraciclina, entre otros.

5)   La Escherichia coli es una bacteria que vive en la flora intestinal y proporciona la vitamina K.

BACTERIAS NOCIVAS PARA EL HOMBRE.

1.   Bacilo de Koch, que produce la tuberculosis.

2.   Bacilo de Eberth, que produce el tifus.

3.   Bacilo de Klebs-löffler, que produce la difteria.

4.   Bacilo colérico, que produce el cólera.

5.   Bacilo de Nicolaier, que produce el tétanos.

BACTERIAS POR ÁREA EN EL CUERPO.

Ø MANOS. 2 millones de microorganismos/cm2. Se estima que aloja unos 40,000 tipos de microrganismos, entre los cuales se encuentran hongos que pueden causar infecciones en el organismo y son de gran peligro para personas con problemas de inmunodeficiencia.

Ø PIES. 10 millones de microorganismos/cm2. Bacterias comunes en esta área son las del género Brevibacterium, que se alimentan con células muertas de la piel, grasas y suciedad formada entre los dedos. El ácido sulfúrico que liberan produce un olor característico.

Ø ROSTRO. 1 millón de microorganismos/cm2. Un microrganismo usual en esta región es el Propionibacterium acnés, que se alimentan de los ácidos grasos propios de esta zona. La infección que produce en la piel es la que ocasiona el acné.

Ø BOCA. 1000 millones de microorganismos/cm2. Malos hábitos de higiene producen la presencia de bacterias como Atopobium parvulum y Solobacterium moorei, entre otras, que se asientan en la lengua y descomponen restos de alimento, contaminando la boca.

Ø AXILAS. 10 millones de microorganismos/cm2. El líquido generado por la transpiración contiene metabolitos, que son utilizados como alimento por bacterias del género Corynebacterium. Ello genera mal olor y puede ocasionar graves infecciones dérmicas.

Ø COLON. 100,000 millones de microorganismos/cm2. Aloja a una bacteria que, presente en un alimento, puede ser letal: la Escherichia coli. Sus cepas mutantes matan a miles de bebes al año. Sin embargo, se requieren ciertas variedades para el funcionamiento del intestino.

TIPOS MÁS COMUNES DE BACTERIAS EN EL CUERPO HUMANO.
1.   Staphylococcus epidermidis. Se presenta con mucha frecuencia en la piel de humanos y animales, y en membranas mucosas. Es sensible al antibiótico novobiocina. Posee una capa externa de polisacáridos que impide la penetración de antibióticos, lo que dificulta el tratamiento. Se encuentra en la piel, ojos, nariz, garganta, boca, intestino grueso y uretra.

2.   Staphylococcus aureus. Es una bacteria anaeróbica (no utiliza oxígeno) muy distribuida por el mundo. Se estima que más del 30% de la población mundial se encuentra colonizada o infectada por ella. Causa diversas enfermedades y es la principal causante de infecciones nosocomiales (adquiridas dentro del hospital). Es resistente a la penicilina, por lo que se usa en su tratamiento aminoglucósidos, cefalosporinas, oxacilina o nafcilina. Su presencia se puede considerar normal en la piel; pero, cuando las defensas se encuentran debilitadas, puede causar una enfermedad. En el hombre se encuentra en la piel, nariz, garganta, boca e intestino grueso.

3.   Streptococcus salivarius. Coloniza la boca y la zona superior de los seres humanos, después del nacimiento, por lo cual, la posterior exposición a ella es inofensiva. Es un patógeno oportunista, encontrado poco comúnmente en el torrente sanguíneo donde ha estado relacionado a casos de septicemia en personas con neutropenia. En el hombre se encuentran en la garganta y la boca.

4.   Enterococcus faecalis. Habita en el tracto intestinal de humanos y otros mamíferos. Es muy resistente a condiciones adversas, tales como la desecación, el calor o tratamiento térmico, entre otras. Por ese motivo, es un buen indicador de condiciones higiénicas en alimentos congelados y desecados. Puede causar infecciones en la vejiga, la próstata, el epidídimo y, de manera menos común, en el sistema nervioso. En el hombre, se encuentra en la boca e intestino grueso.

5.   Haemophilus influenzae. Es una bacteria aeróbica que puede crecer como anaeróbica. Es responsable de un gran número de enfermedades como la meningites, epiglotis, neumonía, sepsis, entre otras. Es un patógeno oportunista que puede habitar por mucho tiempo a un huésped y atacar el organismo cuando se dan las condiciones que requiere. En el ser humano, se encuentra en la nariz, la garganta y la boca.

6.   Escherichia coli. Es el organismo procariota más estudiado por el ser humano. Habita generalmente los intestinos de animales, pero se puede encontrar en todos lados. Es una de las bacterias necesarias para el correcto funcionamiento del proceso digestivo, así como para producir las vitaminas B y K. Es anaeróbico, de fácil adquisición y gran resistencia a antibióticos, por lo cual no se prescriben. Puede causar infecciones intestinales y extraintestinales graves como cistitis, meningitis, peritonitis, mastitis, septicemia y neumonía.

7.   Género Proteus. Son responsables de muchas infecciones tracto urinario. Puede estar en todos lados y generalmente se ubican en el tracto intestinal del hombre y de algunos animales. Otras áreas en el hombre en la que se hallan comúnmente son la nariz, garganta, boca y uretra. De las cinco especies conocidas, tres causan infecciones oportunistas en el hombre: Proteus vulgaris, Proteus mirabilis y Proteus penneri.

8.   Género Lactobacillus. Son bacterias anaeróbicas facultativas que reciben su nombre por su capacidad para convertir la lactosa y otros monosacáridos en acido láctico. Normalmente son inofensivas e incluso necesarias para el desarrollo del hombre y otros animales. Por la acidez que producen, inhiben la presencia de bacterias dañinas. Son los únicos seres vivos que no necesitan hierro para vivir y algunas variedades se utilizan para la producción de yogur.

9.   Género Corynebacterium. Son bacterias anaérobicas facultativas. Están ampliamente distribuidas en la naturaleza, pudiendo hallarse en el suelo, plantas y piel del hombre. Algunas variedades producen enfermedades tan dañinas como la difteria, que deteriora los tejidos alrededor de las amígdalas y la faringe. Otras variedades se alojan en las axilas, produciendo mal olor. En el hombre, se hallan principalmente en la piel, nariz, ojos, garganta, boca, intestino grueso y uretra.